Como sabéis, ayer nos reunimos los dos comités con representantes de las consultoras que están elaborando el plan de negocio de la Cámara. Por parte de la empresa estuvo presente el subdirector.
Desafortunadamente, no podemos trasladaros ninguna información acerca de los trabajos realizados hasta la fecha porque no nos la dieron. Por parte del subdirector unas veces se nos decía que se trata de información incompleta que sólo tendrá sentido cuando se vea globalmente. Otras que no hay nada que nos puedan entregar. Otras que sólo los órganos rectores de la Cámara (Presidente, Pleno y Comité) pueden decidir si se nos facilita la información. Y todo esto cuando hace unos días se nos había dicho que la parte del informe referente al patrimonio de la Cámara ya estaba finalizada y que la relativa a las sociedades participadas ya estaba en borrador.
El hecho cierto es que desde las consultoras sólo nos contaron cuatro vaguedades que os resumimos a continuación:
El plan de viabilidad se compone de cuatro fases, todas en fase de diagnóstico:
- Patrimonio (edificios)
- Entidades participadas (en las que la Cámara tiene alguna participación)
- Plan de negocio (comprende los mercados y el negocio a los que dirigirse).
- Nueva organización (incluye la nueva estructura de RR.HH. y un estudio de la nueva regulación legal en relación a los órganos rectores)
Por parte de Equipo Económico, Ricardo Martínez Rico comentó que la Cámara tiene grandes activos, que están buscando la financiación para las actividades que desarrolla la Cámara. Explicaron que la misión que tiene la consultora es plasmar su opinión sobre las áreas y trasladarlo a los órganos de gobierno para que sean ellos los que tomen las decisiones. Indicó que se están dirigiendo a muchas organizaciones para conseguir buenas y distintas opiniones que les ayuden.
Desde la Fundación Lafer, Manuel Lamela abrió su intervención explicando que la consultora es un equipo mixto que no ha aterrizado con ninguna idea preconcebida. Manifestó que la Cámara cuenta sin duda alguna con un gran prestigio y utilidad para las empresas y que eso es un gran activo, así como que el IFE es una institución de enorme potencial con grandes fuentes de sostenibilidad“. Expresó que el objetivo fundamental es preservar y conservar la Cámara, ya que se abre una nueva etapa por el cambio normativo y que lo que hay que buscar es la garantía de la viabilidad del modelo con el nuevo marco legal, y que lo que se haga debe tener una estructura que garantice la continuidad. Se pretende dotar a los órganos rectores de la herramienta necesaria para la toma de decisiones.
Nos explicaron que trabajan con un equipo de 10 personas, cuya misión es conocer al máximo por dentro la Cámara, (el qué, por qué, quién, cómo de las cosas) y poder así hacer un diagnóstico real y reconducirlo a cada una de las áreas que les han señalado.
Finalizaron su exposición indicando que el gran objetivo de la Cámara tiene que ser conseguir al menos saldo cero, sostenibilidad económica, ya que es una institución sin ánimo de lucro y no es necesario que dé beneficios, pero que tiene que ser sostenible y viable por sí sola. Al pedir aclaración sobre lo que significa "por sí sola" nos indicó que se buscaba la viabilidad sólo con cobro de cuotas y servicios, sin depender de subvenciones o encomiendas cuya concesión o importe puede variar de un año a otro.
Llegado el turno de preguntas y tras tachar las que llevábamos preparadas dado que, con la escasísima información trasladada optamos por no perder el tiempo y plantear dudas que sí esperábamos resolver. Nuestro gozo en un pozo: nos quedamos como estábamos….
Les preguntamos por los informes previos y plazos de su entrega a los miembros del comité y las respuestas, al igual que la exposición, no nos aclararon nada: la consultora tiene contrato hasta el 15 de agosto, no obstante la Cámara ha pedido a la consultora que en la medida de lo posible adelante la entrega del plan a los organos de gobierno de la Cámara a la primera quincena de Julio, pero actualmente no hay nada definitivo para entregar al comité porque están trabajando en ello y cuando lo tengan, previa autorización de los órganos de gobierno camerales, nos los harán llegar. Insistimos en las fases del plan, nos confirmaron que llevaban un informe y el borrador de otro y que quedaban pendientes los informes más relevantes y con mayor información. Respondimos que no entendíamos como en cuatro meses habían realizado sólo un informe y un borrador y en dos meses pretendían terminar los tres más importantes, que eso evidenciaba que tenían información pero que no la querían trasmitir. La respuesta del subdirector fue que "tomaba nota" de nuestra petición y que en cuanto lo tuvieran "previa autorización de los órganos de gobierno camerales" nos lo harían llegar.
Preguntados por la reestructuración de plantilla de personal, tras mucho insistir por distintas vías, únicamente nos trasladaron que se llevará a cabo puesto que los ingresos en 2012 caerán significativamente, pero no respondieron a cuántas personas afectará y cómo se hará, si la reducción se hará reduciendo masa salarial o número de empleados. Dieron la callada por respuesta.
En vista de que tampoco obteníamos respuestas les comentamos claramente que ante esta reunión tan poco fructífera no sabíamos qué transmitir a los compañeros, ante lo que el subdirector recalcó por enésima vez que están trabajando en ello, haciendo un plan muy serio, en el que aún se desconoce el número de personas que se verán afectadas pero que la restructuración es "una realidad que no podemos evitar" y no pidió que os transmitiéramos tranquilidad puesto que están trabajando "con responsabilidad".
Finalmente, para justificar la reunión los representantes de las consultoras nos dijeron que ellos habían venido a escuchar las propuestas del comité, igual que habían escuchado las de los directores de área. Desde el comité de Ribera-Delegaciones dijimos que, efectivamente, teníamos elaboradas unas propuestas, tanto generales como particulares. Al oír esto, el subdirector nos señaló que esas propuestas debíamos comentarlas y entregarlas a nuestros directores de área para que éstos las trasladaran a la Dirección. Desde el comité de Ribera-Delegaciones se le recordó que los comités de empresa son libres para hacer las aportaciones que consideren sin someterse a la Dirección. A continuación, hicimos un resumen verbal de las propuestas y se entregaron completas en papel a las consultoras, con copia registrada a Dirección y Subdirección. Para que los empleados las conozcáis, las colgamos aquí abajo en un adjunto.
En conclusión, que tras una reunión muy tensa, resulta que de lo que nos dijo el presidente en enero sobre participar y ser parte activa en el plan de viabilidad, cosa que nos han venido repitiendo a ambos comités que se haría desde entonces, nada de nada. No nos han trasladado ninguno de los avances y hemos podido entregar nuestras propuestas a la consultora a duras penas. Eso sí, lo de que va a haber reestructuración y que además se prevé dura, lo tienen clarísimo y sin finalizar el plan de viabilidad.
Menos mal que no había ideas preconcebidas.